Dalí dijo que “el que quiere interesar, tiene que provocar”, pero… ¿a qué precio?
Dalí gusta y disgusta. Pero hay algo indiscutible: supo ganarse el título de genio. Es universal, no tanto por su afán provocador, sino por la admiración que inspira su trabajo exquisito y meticuloso. Entendió que la provocación útil es fruto de un trabajo meditado, un esfuerzo de largo recorrido.
En Redbility compartimos esta premisa y nuestros proyectos no surgen de un chispazo creativo, ni de la primera sesión de brainstorming. Nos gusta provocar, sí. Buscamos ir siempre un paso más allá y explorar los extremos de la comunicación. Pero sabemos, en cada momento, qué terreno estamos pisando y qué efectos buscamos a provocar. Queremos generar interés y garantizarnos que vamos a acertar. Sólo así podemos ofrecer soluciones innovadoras, exitosas y rentables.
¿Cómo lo hacemos?
El 80% de las variables que intervienen en las decisiones de compra son inconscientes o emocionales, ajenas a cualquier proceso racional. Dejar este margen al azar es suicida en términos de márketing. Nosotros hemos buscado la forma de anticiparnos al éxito o fracaso de una idea, una imagen o un diseño asociado a tu marca, “controlando” y midiendo el impacto que va a tener en un cliente/público potencial.
El Emotional Tracking es una herramienta basada en los principios del neuromárketing, que permite anticipar el impacto emocional de una campaña y decidir sobre el efecto que buscamos provocar. Sólo así tendrás la certeza de que tu experiencia de marca será positiva y que la inversión realizada obtendrá el rendimiento esperado.
Somos los primeros y únicos en implantarla en España y empresas líderes como eBay, Telefónica, Instituto de Empresa (IE) y BBVA han apostado por ella para mejorar, dirigir y optimizar sus campañas.
Activación emocional
¿Recuerdas la sensación que has tenido al ver campañas publicitarias para dejar de fumar? Probablemente, si lo analizas detenidamente, caerás en la cuenta de que la mayoría de ellas te provocaron más ansiedad y ganas de fumar; justamente lo contrario a su propósito.
Efectos inesperados como éstos suceden, a menudo, porque -tal como lo investigó el neuromarketing- determinados estímulos activan zonas del cerebro vinculadas a nuestra memoria reciente favoreciendo una determinada asociación. Que esta sea positiva o negativa es algo que puede ser medido y probado con el Emotional Tracking.
Este método supone un avance respecto a los datos que nos proporciona el eye tracker tradicional (un mapa térmico indicador tanto del recorrido como de los puntos de atención de la mirada). La novedad es que ahora también podemos medir las reacciones biológicas del cuerpo humano ante estímulos visuales mediante dos indicadores fisiológicos: la frecuencia de parpadeo y la dilatación de la pupila. El ojo reacciona de manera diferente según perciba algo que le produzca placer o rechazo. Y en Redbility somos capaces de detectarlo y medirlo. Así, podemos saber de antemano si una campaña se basa en recursos comunicativos exitosos o errados según el target al que se dirige. Por eso…
¿Vas a seguir dejando al AZAR el ÉXITO de tus campañas?
Compartir
Suscríbete a nuestra newsletter
También te puede interesar
-
Too Good To Go, ¡esto no tiene desperdicio!
General
8 marzo 2023
Nos sentamos con Too Good To Go para analizar la relación entre la sostenibilidad y la experiencia de usuario.
-
COPE, la (r)evolución del audio
General
2 marzo 2023
Andoni Orrantia y Javier de Mora de ÁBSIDE MEDIA nos cuentan como se han adaptado a la transformación digital.